El Gallinero

La gente acompaña como siempre.Era el partido ideal para reencontrarse con la victoria y así fue. 
Al minuto de juego los corazones millonarios vibraban y las gargantas se preparaban, por que Gustavo Canales eludía a un defensor tombino y quedaba a metros del gol que Ibañez le ahogaría,y que el Muñeco Gallardo concretaría pero en posición adelantada. El espiritu era otro y se notaba. A los 10 minutos, fue lo de siempre caída en el area contraria, penal claramente notorio, pero que el árbitro descide no otorgar. No obstante la labor de River seguía siendo muy buena, con llegadas profundas (un cabezazo en el palo de Canales). Pero un ex de la casa, parecía que comenzaba a arruinar la noche que tan bien pintaba, Federico Higuaín a los 32 minutos del primer tiempo ponía en la primera llegada del conjunto visitante, el 0-1. River no se desanimo y el juego siguió, no era el mismo que en los primeros treinta minutos, pero las intenciones seguían igual.
Casi 9 horas tuvieron que esperar las gargantas millonarias para en el minuto 24 del segundo tiempo explotar de la mano de Ariel Ortega en un grito de gol, la ilusión se renovaba, pero mientras la gente coreaba al ídolo por haber concretado despues de 534 minutos de sequía, los mendocinos se equibocan en el fondo y Paulo Ferrari, con gran habilidad eludió al arquero para que un minuto más tarde del primer gol el monumental vuelva a explotar. Godoy Cruz no tuvo reacción, aunque los nervios llevaron a River a su campo, pero sin sufrir situaciones netas de gol; para los tombinos no fue lo mismo, ya que podrían haberse llevado un gol más en contra si river hubiera pisado el acelerador en alguna contra. Toda la gente que llegó ilusionada a Nuñez recibió su paga. El mundo River esta feliz, al menos por unos días hasta que llegue el próximo compromiso.